García-Palacios Álvarez: “Hemos ganado en solidez, solvencia y confianza de los clientes”

 en la sección Anuario
Mercados21 | García-Palacios Álvarez:

Analizamos con el presidente de Caja Rural del Sur, José Luis García-Palacios Álvarez, la situación del sistema financiero español y de la propia entidad que preside. Destaca de la evolución de la cooperativa de crédito su “solidez y solvencia” a pesar de la situación económica de los últimos tiempos. Tampoco podíamos dejar pasar la ocasión para conocer su punto de vista sobre los efectos del actual escenario catalán y sobre futuros movimientos en el tablero financiero nacional.

La agencia de calificación Fitch ha ratificado el rating de la entidad como “BBB con perspectiva estable” a pesar del complejo entorno. ¿Cuáles son las perspectivas de Caja Rural del Sur para este año?

Las previsiones son precisamente la estabilidad, algo meritorio dada la complejidad del entorno, como bien indica en la pregunta. Hay que tener en cuenta la profunda transformación del sistema financiero español en los últimos años, lo que ha dado lugar a una serie de entidades que han multiplicado su tamaño de forma notable, resultando entre otras cuestiones, un escenario muy agresivo en lo que a competencia en el mercado se refiere. Aun así, nuestro modelo financiero no solo se ha mantenido, sino que hemos ganado en solidez, solvencia y, lo más importante, en confianza a nuestros socios y clientes.

De hecho, el rating destaca los datos de solvencia y cobertura, con un porcentaje que supera más del doble de lo exigido por ley. ¿Qué política de gestión sigue la entidad para alcanzar estas ratios?

Cuando tienes entre tus objetivos la confianza de nuestros socios y clientes una de sus principales reglas debe ser mantener una actitud productiva para su mantenimiento, para ello debemos establecer políticas de gobierno orientadas al incremento de la fortaleza como entidad financiera, que en definitiva es la principal razón de generación de seguridad. En este aspecto el Consejo Rector es buen conocedor de este fin y para ello articula las medidas precisas para transmitir buen hacer, prudencia y estabilidad, además de explorar todos los sectores económicos donde podamos ofrecer un servicio financiero seguro y estable que den lugar a esa relación de confianza que, en definitiva, todos buscamos.

En cualquier caso, la situación política en España no es fácil. El escenario catalán está afectando al sistema financiero español. A su juicio, ¿qué consecuencias globales puede tener la tensión en Cataluña en el sistema?

Evidentemente las tiene y las tendrá, de hecho las está produciendo desde hace ya un tiempo. Cataluña es una comunidad autónoma muy importante de España y no debemos caer en el error de identificarla como el origen de este problema actual, si acaso como una afectada más. Todo este sin sentido viene producido por el radicalismo ideológico, en clara mezcla con una situación crítica que vivimos hace unos años en España, fruto de ello ha sido una escenificación populista muy claramente dirigida en un entorno proclive a ello. Resultado, todos los españoles estamos afectados, directa o indirectamente y en mayor o menor grado, quien piense lo contrario está en un error. La inestabilidad política e inseguridad jurídica solo provoca éxodos, en todos los sentidos, sociales, económicos, productivos, inversores. Sinceramente pienso que estamos en un momento muy delicado, de nuestra joven democracia, quizá el más complicado, y para ello debemos tener ahora más que nunca, conciencia de grupo, porque las consecuencias vamos a tener que afrontarlas entre todos.

En términos generales, el sistema financiero español goza de buena salud en estos momentos

¿Entramos en una nueva etapa de incertidumbre, en la que vuelva a moverse el tablero y asistamos a nuevos procesos de concentración y fusión de entidades?

No necesariamente, las que puedan producirse será por conveniencia estratégica. En estos momentos, el sistema financiero español goza de buena salud, en términos generales, por ello no creo que asistamos a una búsqueda masiva parecida como la acaecida estos años atrás. Cierto es también que el número de entidades se ha reducido bastante, a cotas de concentración jamás imaginadas, con sus ventajas e inconvenientes, claro está, lo cual reduce considerablemente esa posibilidad. En el sector de las cooperativas de crédito hemos diseñado un marco regulatorio, de acuerdo con el BdEsp y el Mineco, que nos permitirá ciertas dosis de autogestión en este sentido, siempre dirigidas a mejorar aún más nuestra posición en ese tablero nacional del sistema financiero. Por cierto, sector financiero, el de las cooperativas de crédito, que no ha precisado ayuda pública alguna de rescate.

Volviendo a la entidad, desde el punto de vista netamente empresarial, ¿con qué volumen aproximado de crédito y financiación a las empresas ha finalizado el año Caja Rural del Sur?

Nuestro compromiso con los clientes es absoluto, y siempre apoyamos y apoyaremos todos aquellos proyectos que sean viables, tanto particulares como de empresas. Estaremos al lado del tejido productivo, que es el responsable del avance, del desarrollo y la generación de oportunidades. En el ejercicio 2017 el volumen de créditos y financiación ha superado los 1,2 millones de euros.

Los datos del sector confirman un incremento muy importante de las interacciones online. ¿Qué balance puede hacernos de la apuesta por la tecnología de la caja? ¿Cuáles son sus principales objetivos a corto y medio plazo?

Es fundamental. Dijo Henry Ford en los albores del siglo XX que “el verdadero progreso está en poner la tecnología al alcance de todos”, precisamente con ese objetivo se constituyó, en el año 1987, RSI (Rural Servicios Informáticos) la cual dota de tecnología a todo el grupo Caja Rural. No en vano la primera banca electrónica de España la lanzó RSI. Estamos inmersos en ello, nuestro fin es el servicio a nuestros socios y clientes, por tanto no tenemos objetivos a corto o medio plazo, es nuestro objetivo, en el amplio sentido del término.

En la UE operan 1.500 fintech, de las que el 30% no están sujetas a regulación oficial

En este sentido, las llamadas fintech han entrado con fuerza en el sector. Grandes entidades financieras nacionales están comenzando a colaborar y aliarse con ellas. ¿Suponen una oportunidad o una amenaza para el resto de entidades?

Es una oportunidad, sin duda, por varios motivos. Primero, ese mismo que indica, la posibilidad de colaborar con las mismas. Pero supone asimismo un aliciente para definir en qué podemos evolucionar a este respecto. Es cierto que es un floreciente sector digital, como también es cierto que en este nuevo “mundo” virtual se actúe con la debida seguridad para el usuario, por ello es necesario una debida regulación de las mismas, de forma que tengamos la certeza de actuar con unos suficientes niveles de confianza. Actualmente en la UE operan unas 1.500 fintech, de las cuales en torno al 30% parece que no están sujetas a regulación oficial, algo que debería solucionarse pronto, por simple responsabilidad para con los posibles usuarios, si bien no deberán llevarse a engaños si son conscientes de ello y, aun así, operan con éstas.

Caja Rural del Sur se encuentra en un proceso de renovación y adaptación a las exigencias del mercado y del cliente, con un claro acercamiento a un perfil más urbano, sin olvidar la historia y trayectoria de la caja. El Consejo Rector lo eligió por unanimidad como presidente hace casi un año. ¿Cuáles van a ser las líneas estratégicas de la entidad de cara a los próximos años?

Este proceso es un comportamiento natural más que una impostura. En este sentido debo decir que en nuestras prestaciones financieras, si bien tuvieron su origen en el medio rural y en el sector agroalimentario, practicamos una permanente evolución con el fin de prestar el mejor servicio posible, en óptimas condiciones de seguridad, cercanía y empatía, a la pymes y autónomos, sean del sector empresarial o actividad económica que sean. Nuestro perfil nos va a facilitar ser referencia en la financiación local, de los consumidores y empresas que se inclinen por una entidad que puedan considerar como suya, como dice nuestro eslogan, que forme parte de ti. Y esto sin restar lo más mínimo al sector agroalimentario andaluz, todo lo contrario, mejorando nuestra implicación en el mismo y diseñando herramientas y servicios que solo un profundo conocimiento del mismo puede permitirte su definición, de forma compartida y, sobre todo, comprometida con el propio sector.

La globalización y digitalización de la economía ha abierto muchas oportunidades a empresas cuyo modelo empresarial y de gestión se pueden catalogar de economía colaborativa. Modelo que en muchos aspectos está muy próximo al del cooperativismo. ¿Supone el auge de estos negocios la apertura de un nicho más que interesante para las cooperativas de crédito?

De hecho muchos autores la definen como economía cooperativa, solo que actualizada en su lenguaje, por darle cierta novedad en su difusión. El cooperativismo de crédito en España lleva más de un siglo funcionando y evolucionando. Además, el hecho de tener como socio del Grupo Caja Rural al banco cooperativo más importante de Alemania y uno de los tres mayores de la UE, no hace más que tengamos un músculo muy entrenado en estas nuevas corrientes sociales, puesto que podemos anticiparnos con ejemplos practicados en otros territorios. Por finalizar, resaltar algo que debemos llevar todos a cabo, que no es otra cosa que tener una mentalidad proactiva en la mejora de nuestra capacidad de adaptación a un entorno cada vez más veloz en los procesos de cambios sociales, económicos y culturales.

Últimas noticias