Mejorar los resultados empresariales con un ‘Interim Manager’

 en la sección Opinión

Mercados21 | Mejorar los resultados empresariales con un 'Interim Manager'

Eric MassEn la vorágine del mundo empresarial se presentan numerosas situaciones que para afrontarlas con éxito, las organizaciones necesitan la experiencia de un experto o equipo de expertos, con el que no cuentan en interno, a menudo no lo necesitan de forma permanente e incluso no todos los días.

Las necesidades y escenarios son muy diversos, van desde: revitalizar un negocio, alcanzar las expectativas de los inversores, mejorar los resultados para asegurar el éxito en un proceso de venta o salida a bolsa, aumentar los beneficios y reducir costes, incrementar la productividad, entrar en nuevos mercados, procesos de internacionalización, la sustitución temporal de un cargo directivo, desempeñar una tarea específica dentro de la organización, reforzar el liderazgo frente a problemas imprevistos, la gestión de un cambio organizacional como puede ser intervenir después de un proceso de compra o fusión, preparar una escisión y venta, reestructurar áreas de negocio, profesionalizar la empresa familiar, preparar la sucesión, la transformación digital de la empresa, gestionar un rápido crecimiento, etc.

Cuando el tiempo es además crítico y las empresas no están en condiciones de atraer talento adecuado frente a grandes corporaciones, ya que por su elevada cualificación son pocas las empresas que pueden asumir su salario y condiciones en caso de contratación directa, una figura clave para la resolución de estos problemas es el denominado “Interim Manager”.

El término, procedente del mundo anglosajón, se define como un profesional con acreditada experiencia en gestión empresarial y/o conocimientos técnicos en una o varias materias, que pone su saber hacer al servicio de una empresa en situaciones como las mencionadas y se incorpora a la estructura directiva durante un tiempo determinado o con una dedicación a tiempo parcial para gestionar una misión o proyecto concreto y conseguir resultados, contratado a través de empresas especializadas que cuentan con este nivel de profesionales.

Muchas empresas no están preparadas para gestionar problemas coyunturales que no han vivido con anterioridad, y al intentar resolverlos con sus propios medios, cometen numerosos errores por desconocimiento. Un “Interim Manager” aporta una visión externa y objetiva de los retos y problemas de la empresa, los ha vivido ya en otras circunstancias, sabe cuáles son los aciertos y errores para encontrar soluciones y nos ayuda a recorrer el camino de posibles obstáculos con toda seguridad. Llegados a este punto, todas las empresas con problemas y que necesiten ser viables, se trate de una gran corporación, una Pyme, un Fondo de Capital Riesgo, etc., deberían contemplar como solución a sus problemas la figura del “Interim Manager”, práctica ampliamente extendida en países como Inglaterra y Estados Unidos.

Las principales ventajas de contar con un “Interim Manager” son:

1) aportar conocimiento adquirido en experiencias previas y talento de forma inmediata, por el tiempo o la dedicación que necesitamos y controlando su coste, pasando de ser un coste fijo y permanente en el caso de contratar en plantilla a un directivo a variable o a coste de duración determinada;

2) poner en marcha proyectos que son prioritarios, definiendo objetivos y plazos, para ser ejecutados por una persona con experiencia suficiente como para conseguir resultados;

3) ofrecer resultados rápidos con el máximo impacto;

4) capacidad para acompañar o incluso dirigir el cambio. El “Interim Manager” puede incorporarse a trabajar individualmente o en equipo y asumir responsabilidades de CEO, CFO, COO, CPO, etc. en plazos inferiores a dos semanas;

5) el “Interim Manager” no amenaza la posición del resto de directivos en plantilla, puesto que no va a quedarse salvo que se siga colaborando en un formato de tiempo parcial.

Con la incorporación de un “Interim Manager” los beneficios son pues inmediatos. Puede desarrollar una función para la que nadie está cualificado en interno, u ocupar un nuevo puesto. En situaciones tan acuciantes como las que hemos vivido durante estos últimos años y que aún permanecen, contar con un experto que nos ayude a mantener y mejorar el rumbo de la compañía nos da seguridad. El intercambio de conocimiento y experiencias con el equipo directivo es muy enriquecedor para ambas partes, desde una Dirección Técnica, Operaciones, Financiera, Recursos Humanos, o incluso General, prestando servicios de gestión del cambio, desarrollo de negocio, dirección de proyectos, de transición, mentoring, formación etc.

El protocolo de actuación de un “Interim Manager” suele ser el siguiente, tras una evaluación del alcance del proyecto, analiza de forma detallada la situación hasta llegar a un diagnóstico y posterior definición de la propuesta concreta de actuación, con unos objetivos cuantificables. Seguidamente implementa el Plan de actuación, integrándose como uno más de la plantilla y reportando sus avances al más alto nivel. Una vez realizado y en su fase de salida de la compañía, puede traspasar sus funciones al equipo directivo, previamente capacitado para proseguir con su labor.

La relación se establece mediante un contrato en el que se determina el alcance y objetivos de la misión, el ámbito temporal, la capacidad de decisión y poderes otorgados, así como la remuneración, que por lo general puede constar de una parte fija y otra variable, vinculada a la consecución de los objetivos fijados.

Así pues, ya no es necesario hoy en día contratar un nuevo directivo senior de forma permanente para resolver una situación o desempeñar una tarea específica. Un directivo externo a la compañía puede contribuir a su desarrollo durante un período determinado. La contratación temporal de estos profesionales permite aplicar sus conocimientos para el desarrollo completo de la estructura que necesitan las empresas, incrementar su competitividad y abordar cualquier proceso (la gestión de compras, desarrollo de las ventas, los recursos humanos, etc.).

Para las empresas de Capital Riesgo el “Interim Manager” es un recurso habitual. Aporta valor facilitando la mejor solución de gestión en cada fase de una de las transacciones que genera en sus empresas participadas: evaluando una empresa potencial para su compra, mejorando los resultados de las compañías de su portfolio, vendiendo una sociedad de la cartera, etc.

Resumiendo, mejorar los resultados empresariales con un “Interim Manager” es una buena fórmula para conseguir resultados rápidos, en el tiempo que necesitamos y controlando su coste.

Recommended Posts